16 de febrero de 2007

Estrellas Interiores

Cuando miramos hacia las estrellas en la noche, no sólo estamos viendo unas cuantas lucecitas que parpadean incandescentemente, sino estamos viendo al universo mismo. Y cuando yo miro hacia ellas generalmente quedo atónito como cuando los lobos miran hacia la luna; en esos instantes realmente no me pregunto si hay vida en otros lugares, si acaso el universo tiene cientos o miles de millones de años, o si un cometa o asteroide acabara con la vida en la tierra; observo a las estrellas y solamente las observo, nada más. Es como ver a Monserrate, Guadalupe o al Colpatria. Uno pocas veces se pregunta bobadas, sólo se observa la esencia de las cosas; es decir, aquello que las hace ser ellas mismas y no otras. Monserrate es en cuanto es, ese es su principio. Al igual que Bogotá que no puede ser otra por que es ella misma. Es la estrella más brillante de todas y vivimos en ella. Es el origen de muchos de nosotros, nuestra casa, nuestra habitación, nuestro corazón. Es en síntesis nuestro universo que es alimentado por nuestros sentimientos y por nuestra felicidad. Realmente es majestuoso vivir en Bogotá pues si entendemos que ella es en cuanto un principio cierto, también entenderemos que nosotros somos en cuanto sus habitantes. Es por ello que cuando observo a Bogotá me convierto en un lobo que ama su morada.


PD: Imagen lograda con la cámara VGA de un celular Nokia 3220 - El 8 de enero de 2007

1 comentario:

Unknown dijo...

De repente encontrar espacios que evocan, congelan y distraen el tiempo que se presume real, resulta ser un exquisito dulce para el alma. Recordar que lo importante de estar aquí es buscar estar más allá de la cotidianidad errada es un logro de este espacio.